Santo Domingo.- La primera dama Margarita Cedeño de Fernández prometió a la madre de las siamesas nacidas el pasado jueves en el hospital Luis Eduardo Aybar, que asumirá el tratamiento quirúrgico que requiera la separación de las bebés, sea en el país o en el extranjero.
La promesa de apoyo fue hecha durante una visita que le hiciera la Primera Dama en horas de la madrugada del sábado a la madre de las niñas, Elisandra Santos, atendiendo a un llamado que ésta le hiciera a través de LISTÍN DIARIO, en el que asegura que la doctora Cedeño de Fernández era su única esperanza para operar a sus recién nacidas.
En tanto, ayer las siamesas María Teresa y Teresa María, nacidas unidas por el abdomen, continuaban estables, alimentándose y en espera de ser sometidas a otros estudios en el hospital Aybar. Los resultados de la primera tomografía que se le practicó determinó que las niñas comparten el mismo hígado.
En su visita sorpresa a la madre de las siamesas, Cedeño de Fernández le ofreció todo su apoyo para hacerle la operación que requieran las niñas sea en el Robert Infantil Robert Reid Cabral, en el hospital General de la Plaza de la Salud o en el Hospital Metropolitano de Santiago, centros que asegura cuentan con la capacidad instalada para hacer el tratamiento.
La Primera Dama llegó al hospital alrededor de las 12:30 de la madrugada del sábado y conversó ampliamente con Elisandra Santos, asegurándole que de ser necesario trasladarían a las niñas al Hospital Pediátrico Bambino Gesú, de la Santa Sede, Italia, o al Miami Children’s Hospital, instituciones con las que ha formalizado acuerdos fruto de los viajes de trabajo al exterior que realiza junto al presidente Leonel Fernández.
De acuerdo con informaciones ofrecidas por el Despacho de la Primera Dama, la madre de las niñas se mostró emocionada y aseguró que “sólo Dios y la Primera Dama eran su salvación”. El estado de salud de Santos también es motivo de preocupación de la Primera Dama.
Durante su visita, la doctora Cedeño de Fernández observó a las siamesas, las cuales están muy activas y se encuentran en perfecto estado de salud. “Las disfruté mucho porque una peleaba por entrarse el dedito en la boca, mientras la otra trataba de dormirse”, afirmó.
Resaltó que compartió con el personal que está a cargo de las recién nacidas, María Teresa y Teresa María, y resaltó la capacidad y el buen servicio que ofrecen a las pequeñas.
Durante el tiempo que permaneció en el centro hospitalario se realizaron seis partos y tuvo la oportunidad de ver los niños que se encuentran ingresados en el área de perinatología y a los que nacieron prematuros.
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